CARLOS VAZ FERREIRA
(15/10/1872 - 03/01/1958) (*)
AÑOS INICIALES
Nació en Montevideo. Su familia no lo envió a la escuela y aquel niño de frágil salud -nacido sietemesino- cuyo padre tenía inquietudes culturales, fue educado por maestros particulares en su domicilio. Pronto, la precocidad intelectual del joven Vaz Ferreira habría de quedar reseñada en artículos de prensa de la época. En octubre de 1892 El Día publicaba una nota titulada ‘De Carlos Vaz Ferreira', en la que se citaban pensamientos de ‘un aventajado estudiante' en la revista Las Primeras Ideas, bajo el seudónimo Docteur Pascal: ‘Muchas veces, al ver a los hombres hablando, comiendo, haciendo sus tonterías, me ha sorprendido la idea de que seres en apariencia tan insignificantes y sin importancia, puedan tener que ver con algo tan grande e imponente como la muerte.' Al mes siguiente Samuel Blixen, desde La Razón, destacaba los brillantes resultados obtenidos por ese estudiante en los exámenes universitarios, así como de compañeros de su generación tales como José Pedro Varela (hijo), Horacio García Lagos y Domingo Arena, entre otros. Asimismo, elogiaba sus primeros ensayos literarios, ‘llenos de originalidad, de inspiración y de belleza de estilo'. En 01/1895, en la Tribuna Popular, Víctor Pérez Petit incluía en un balance literario del año 94 un breve estudio de Vaz Ferreira - El Estilo - publicado en La Razón. ‘Es un examen valioso, y digno de la firma de cualquier notable psicólogo, que nos hace reflexionar sobre la teoría de Spencer…'
Con poco más de veinte años ya había incursionado en la literatura con Cuentos Intelectuales (1894), experiencia de la que se apartaría pues el fin de su obra no sería literario. De igual modo había ensayado algunos poemas, que él reconocía de poco valor. Su vínculo más notorio con las letras propiamente dichas fue que en 1894 y 1898 desempeñó interinamente la Cátedra de Literatura.
Durante el último cuarto del siglo XIX se editaron en Montevideo numerosas revistas culturales de corte humanístico y científico. Algunas de las principales, tales como el Boletín de la Sociedad de Ciencias y Letras (1877-1887), la Revista de la Sociedad Universitaria (1884-1885) o los Anales del Ateneo del Uruguay (1880-1886), ya habían ido desapareciendo durante la adolescencia de Vaz Ferreira. En el mes de noviembre de 1891, bajo el segundo Rectorado de Alfredo Vásquez Acevedo, apareció Anales de la Universidad (1891-1955) que habría de ocupar un lugar distinguido, cubriendo un período significativo de la evolución de la Universidad y de nuestra cultura. Esta revista tuvo además el mérito de haber sido la primera que se financiara con fondos públicos. En abril de 1896 se encuentra en ella un primer artículo de Vaz Ferreira: El estudio de la Psicología y su acción sobre ciertos fenómenos mórbidos del espíritu. (a)
Este sería el comienzo de una larga lista de contribuciones en esta publicación. La iniciación docente de Vaz Ferreira exhibe su madurez intelectual y muestra una particular preferencia por esta disciplina, la sicología. Arturo Ardao lo describe como un sicólogo vocacional. Como se ve, por entonces ocupaba el cargo de Catedrático sustituto del Aula de Filosofía. Con una clara exposición y en lenguaje sencillo -características de toda la obra posterior del filósofo- el escrito proponía como idea central que las explicaciones e interpretaciones que la sicología aporta permiten atenuar o eliminar las ilusiones o efectos de esas ilusiones que muchas veces surgen a partir de fenómenos mentales de carácter mórbido, por ejemplo el fetichismo. Más aun, puede representar un freno a – en palabras del autor – la propagación de una ‘literatura patológica'. Naturalmente que, habiendo transcurrido más de 120 años de su redacción, muchos de los planteos seguramente puedan merecer reparos u observaciones. No obstante, para un joven de 23 años, denota sin dudas un bagaje importante de conocimientos con referencias a figuras de relevancia como, por ejemplo, el crítico Max Nordau. En agosto de ese mismo año seguiría el turno en los referidos Anales del ensayo Ideas sobre la Estética Evolucionista (b), en el que desarrolla sus formulaciones sobre este tema a partir de las ideas de Spencer y Guyau.
Por otro lado, la revista universitaria Los Debates incluía en setiembre/1896 el Informe de la Comisión para reformar el Programa de Filosofía, del cual fuera redactor principal y miembro informante. En ese documento se establecía enseñar al estudiante las distintas doctrinas de las diversas escuelas existentes, de un modo imparcial, sin sectarismos. Hay que recordar que el período de formación de Vaz Ferreira coincide con el final de la influencia del positivismo de Herbert Spencer que, si bien hegemónico aún, se encontraba desgastado por el enfrentamiento con el espiritualismo de Victor Cousin. En cuanto a la rama específica de la Sicología, el informe recomendaba el estudio de cada función del espíritu dividiéndola en cinco secciones: introspectiva, fisiológica, de teorías y problemas, experimental y la última a las perturbaciones más comunes de cada función(mórbidas). Poco tiempo después, su interés por esta ciencia de la filosofía continuaría con Curso expositivo de psicología elemental (1897) - libro pionero, tanto por su enfoque contra los dogmatismos como por ser de un escritor nacional - cuyos méritos resaltaría el Dr. Juan A. Ramírez en El Siglo. Es de hacer notar que habían transcurrido menos de 20 años de que Wilhem Wundt creara el primer Laboratorio de Psicología Experimental en la Universidad de Leipzig, y menos de 10 años desde que la teoría neuronal de Santiago Ramón y Cajal comenzara a imponerse en el mundo académico. A pesar de las dificultades propias de la época para familiarizarse con estas nuevas iniciativas e ideas, ellas ya estaban compiladas y explicadas en el texto de Vaz Ferreira. Otro trabajo de 1897 es Psicología y Fisiología. Ese mismo año alcanzaría la titularidad como Profesor de Filosofía de Preparatorios, luego de un concurso consagratorio. A partir de ese momento, con 25 años, se constituiría en una figura fundamental del panorama nacional, en su rol de educador y filósofo.
EW
(*) FUENTES CONSULTADAS:
Ardao, A. (1961) - Introducción a Vaz Ferreira. Montevideo, Barreiro y Ramos.
Vaz Ferreira de Echeverría, S. (1981) - Carlos Vaz Ferreira: vida, obra, personalidad. Apartado de la Revista Histórica, Tomo LIII – Números 157-159.
Ardao, A. (12/1993) - Vaz Ferreira y la Psicología como ciencia. Anales de Enseñanza Secundaria. 2ª época. Año 3, N°4. Montevideo.
Courtoisie, A. (23/5/2008) - Carlos Vaz Ferreira (1872-1958). La vuelta de un grande. El País Cultural, Montevideo.
Ferreira, A., Maiche, A., Gómez, L. (08/2008) - La psicología y su enseñanza. Montevideo, Uruguay Ciencia.