Adquisiciones
Alcides Edgardo Ghiggia fue un futbolista uruguayo-italiano nacido en Montevideo, el 22 de diciembre de 1926 que vivía en una típica casa de barrio de la ciudad de Las Piedras, desde donde administraba un supermercado, negocio con el que había subsistido sus últimos años.
Como deportista, jugó para Sud América (1945-1948), Peñarol (1948-1953), Roma (1953-1963), Milan (1962-1963) y Danubio (1962-1968) y más tarde, de 1957 a 1959, jugó para la selección de Italia. Como entrenador dirigió a Peñarol durante algunos partidos en 1980.
Pero su figura cobró relevancia en el Campeonato Mundial de Fútbol jugado en Brasil en 1950, donde la selección uruguaya fue finalista ante el local, con todos los pronósticos en contra. Con sólo empatar la selección brasileña se haría con el ansiado título. Un público de 175.000 personas presenció el encuentro, que sería -para el fútbol utuguayo- uno de los más recordados de la historia y otro mojón en la tradición de la "garra charrúa" que habia comenzado en Francia, en 1924 con el título de Campeones Olímpicos.
Uruguay y Brasil empataban 1 a 1, a 11 minutos del final del encuentro y fue Ghiggia quien marcó el gol de la diferencia, que dejó al gigante Maracaná en absoluto silencio y convirtió a Uruguay en Campeón del Mundo. Esa victoria conocida como "el Maracanazo" ha tenido gran trascendencia en la historia del fútbol mundial, ya que fue considerada por algunos como la hazaña más grande de la historia de los mundiales.
En el día de ayer, 16 de julio de 2015, cuando se cumplían 65 años de la gesta, Alcides Ghiggia falleció de un paro cardíaco.
El presidente Tabaré Vázquez, expresó desde Brasilia su "profundo dolor" por la muerte del exfutbolista y consideró una "ironía de la vida" que Ghiggia falleciera justo en la fecha del Maracanazo. Además transmitió sus condolencias al pueblo uruguayo y a la familia de Ghiggia.
La Dirección Nacional de Cultura del MEC se une al saludo del presidente, lamentando profundamente la partida de tan excelente deportista, figura indiscutida de nuestra cultura y parte esencial de la identidad uruguaya.
El Maracanazo en el relato de Carlos Solé.
