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RAFAEL CASAL MUÑOZ
(30/06/1923 - 30/05/1986) (*)
Integrante de una familia de escritores. Aquí, junto a su padre Julio J. Casal
De profesión abogado, fue poeta y narrador. Nació en La Coruña hace cien años y falleció en Montevideo, siendo ciudadano natural uruguayo. Residió en Uruguay desde 1927 hasta su muerte. Hijo de Julio J. Casal - Cónsul del Uruguay en aquella localidad de España, impulsor y director de la revista Alfar– y María Concepción Muñoz; hermano de Selva, Marynés y Julio, todos poetas. Su hermano Julio da cuenta del clima literario del hogar en Meditaciones y recuerdos (1955): ‘A la hora de la comida, nos reuníamos alegres, sentados alrededor de la mesa del viejo comedor. Nunca faltaba el debate libre sobre el último libro de poemas de vanguardia, o la nota seria de una lectura.' Dos de sus obras resultaron premiadas por el Ministerio de Instrucción Pública en la categoría inéditos. En primer lugar, el libro de poesía lírica Aire de octubre (1958) elogiado, por ejemplo, por Pedro Leandro Ipuche, Ramón Gómez de la Serna, Dora Isella Russell: No es la sombra//ni la muerte terca, // tu recuerdo es mi pavura. En base a ocho de esos poemas se estrenó en 1963, en el Auditorio del Sodre, la composición homónima de Pedro Ipuche Riva que dos años antes había recibido el primer premio del Ministerio de Instrucción Pública en su categoría. La interpretación estuvo a cargo de Natalia Zimarioff (soprano) -esposa de Ipuche Riva- y Juan Protasi en piano. El segundo, los Cuentos del Señor López (1963), es del género narrativo. Sus textos cortos, sintéticos, casi estampas, son de carácter realista que en algunos casos representan una protesta social por los seres más humildes, y en los que se percibe a su vez al poeta. Estos cuentos –editados bajo el sello de la Biblioteca Alfar y en cuya portada luce una viñeta de Rafael Barradas- fueron analizados por el escritor y crítico literario Gastón Figueira.
En el Archivo Literario de la Biblioteca Nacional se custodian numerosas páginas inéditas, de poesía y prosa, junto a otros documentos valiosos de Casal Muñoz. Su producción puede considerarse breve, así como dispersa, ya que colaboró en publicaciones del exterior y en diarios y revistas de Uruguay como El Mate, del grupo de artistas plásticos ‘Toledo chico'. A su creación en verso se suma: La casa (1961) - que Vicente Aleixandre calificara de bello poemario- y De perros, de ángeles –con prólogo de Hugo E. Pedemonte- (1987). El crítico y ensayista Jorge Albistur ha señalado que en este volumen póstumo aparecen el tema social -expresado en un alegato antimilitarista, la angustia por un eventual apocalipsis o un poema a Salvador Allende-, las reflexiones lírico-filosóficas y un mundo íntimo, cercano a lo autobiográfico. Con relación a La casa, Francisco Espínola -asesor en materia cultural del Banco de La República- entre otros, aconsejó su publicación, lo que pudo concretarse a través de un préstamo que otorgó dicha institución para ello. Dio charlas en AUDE (Asociación Uruguaya de Escritores), en Radio Municipal de Buenos Aires -sobre Antonio Machado-, etc. En Cenáculos y peñas literarias, Ildefonso Pereda Valdés informa que Rafael Casal Muñoz se reunía en un café de Pocitos con varios colaboradores de la revista Alfar: Juvenal Ortiz Saralegui, Uruguay González Poggi, Felipe Novoa, Mariano Olivera Ubios. Ocupó un cargo en el Ministerio de Economía y Finanzas. Sarah Bollo, la poeta y novelista boliviana Yolanda Bedregal, y el poeta, historiador y crítico del arte argentino León Benarós se ocuparon de su obra.
EW
(*) FUENTES CONSULTADAS:
- Colección Rafael Casal Muñoz: Archivo Literario de la Biblioteca Nacional.
- Nuevo Diccionario de Literatura Uruguaya 2001. Montevideo. Alberto Oreggioni - Ediciones Banda Oriental.
- Video Programa de Arteaga N°6, de Pedro Ipuche Riva: sitio web https://www.facebook.com/watch/?v=1966139140339267